En Chile, al igual como ocurre en otros países de América Latina con los programas técnicos de nivel secundario, la Educación Media Técnica Profesional (EMTP) está relativamente balanceada en términos del sexo de sus estudiantes (52% hombres y 48% mujeres). No obstante, la EMTP presenta importantes diferencias en lo relativo a la feminización o masculinización de ciertas áreas de estudio. Mientras las mujeres se concentran en áreas asociadas a sectores de servicios (alimentación, turismo, salud y educación), los hombres lo hacen en áreas industriales “duras” (minería, metalmecánica, electricidad y construcción), que se asocian a mejores remuneraciones y tienen mayor proyección laboral. La presencia de mujeres en las áreas industriales mencionadas es minoritaria, situación que se ha mantenido prácticamente invariante en los últimos 10 años.
Informe de María Paola Sevilla, Leandro Sepúlveda y María José Valdebenito.