El Vicerrector Académico de la UAH, Pedro Milos, fue el encargado de presentar al recientemente nombrado Profesor Emérito y recordar su destacada trayectoria como académico, investigador e impulsor de políticas públicas. “Se trata de un acto de reconocimiento, reconocimiento de los servicios prestados, del tiempo transcurrido y de las huellas dejadas, esto es lo que hace que en la lógica de la tradición de lo “Emérito” algunas personas mantengan sus honores y puedan seguir cumpliendo algunas de sus funciones después de haber prestado los servicios que han entregado. Sin embargo el reconocimiento puede ser visto también desde otra perspectiva considerándolo como una oportunidad de reconocer en el sentido de volver a conocer a quien es objeto de reconocimiento público”.
En su presentación el Vicerrector Académico destacó “Su aporte teórico a la comprensión de la educación como una 
práctica cultural situada históricamente y condicionada por las relaciones de poder resultará fundamental en el medio intelectual chileno. Como también lo será su responsabilidad en la instalación en el silencioso debate de la época de conceptos que cambiarían el modo de entender la política ampliándola al campo de la cultura.
También relevó “Su contribución intelectual, académica y política por más de 40 años ha trascendido las fronteras de las instituciones de las que ha sido parte ganándose un destacado reconocimiento y prestigio en el campo de la educación y las ciencias sociales tanto a nivel nacional como internacional. En América Latina es reconocido tanto a nivel de países como de organismos internacionales por su contribución a procesos de reformas educativas orientadas a mejorar la calidad y equidad en la educación”.
Posteriormente, el Secretario General de la UAH, José Miguel Burmeister, leyó la Resolución del Nombramiento como Profesor Emérito de la UAH, la más alta distinción académica que puede alcanzar un académico titular.
En su lección inaugural “Educación y Democracia: lenta construcción de la Independencia a la actualidad”, el Profesor Emérito García-Huidobro repasó los principales hitos y avances de la educación en Chile, desde la época fundacional de la República hasta nuestros días. De la ley de Instrucción Primaria Obligatoria de 1920 al paulatino avance de la cobertura tanto en la enseñanza primaria como secundaria.
Yo diría que tenemos tres grandes saltos. Hay un primer salto que es la cobertura, pasar de la declaración que la educación es importante a lograr prácticamente en los 60’ para la enseñanza básica y al final de los 80´ para la enseñanza media el que la educación sea de verdad para todos. El segundo elemento que se ha trabajado desde los 90 hasta ahora es que no basta con la cobertura si esa cobertura no conlleva un aprendizaje importante. Este tema central el concepto central de calidad para todos. El tema ya no es solamente cobertura y aprendizaje sino que también inclusión. El lema podría ser “la misma educación para todos” sabemos que nos falta, sabemos que varias de las leyes de este gobierno apuntan en esa dirección. El 7% de le elite de este país se educa en una educación pagada absolutamente separado del resto. Falta mucho todavía”, explicó.
Pero ¿Qué debemos entender por educación inclusiva?, para el experto “La pluralidad lleva a pensar con mucha mayor profundidad el principio de igualdad de oportunidades que debe compatibilizarse con respeto, con aprecio a la diversidad. La Educación inclusiva es aquella que incorpora como igual a la sociedad y que al hacerlo hace inclusiva esa sociedad. Este incorporar al distinto como igual es el centro que nos preocupa. Pensar la educación como inclusiva ofrece un horizonte normativo ético político fecundo para orientar una educación genuinamente democrática”.
Al finalizar su presentación Juan Eduardo García-Huidobro se refirió a Reforma a la educación y sus principales aportes como la inclusión, la gratuidad, el desarrollo profesional docente, la ley de educación ciudadana, entre otras. “Es una de las transformaciones más profundas que se han realizado en décadas…” sentenció.
Finalmente el Rector de la UAH, Eduardo Silva SJ, felicitó al Profesor Emérito y agradeció su aporte al desarrollo de la Universidad. También se refirió al documento de Planificación Estratégica que se entregó durante la ceremonia y que guiará el camino de la institución en los próximos años. “Volvemos a confirmar nuestros fines, nuestros sueños, obviamente confirmamos nuestra misión y nuestra visión, confirmamos las excelencias a las que aspiramos y también confirmamos en lo fundamental los objetivos estratégicos que nos hacen perseverar en la ruta que hemos estado recorriendo. Confirmamos nuestros fines en esos ocho objetivos estratégicos que no comportan excesiva novedad, la novedad está en las metas concretas, en las acciones precisas, en los indicadores y en los responsables y en lo que cada facultad tendrá que hacer en su planificación estratégica para tributar a esta planificación institucional. Me encantaría que podamos tener avances en administración y gestión, así como los avances que estamos teniendo, por ejemplo, en infraestructura”.