El pasado lunes 23 de junio, el curso transversal de Inclusión en la Educación realizó su conversatorio de cierre del semestre titulado «Tres miradas sobre educación inclusiva», convocando a sus estudiantes para hablar sobre esta temática con importantes exponentes a nivel nacional.
El curso transversal de Inclusión en educación llevó a cabo su conversatorio de cierre del semestre titulado «Tres miradas sobre educación inclusiva». Este fue organizado por el académico Pablo Astudillo, la académica Paula Alarcón y la profesora Pamela Tomé, quienes imparten este curso ideado por iniciativa del proyecto AES Pedagogías 2025 de la Facultad de Educación.
Este conversatorio contó con la participación, como su título lo adelanta, de tres importantes exponentes: Francisca Baeza, Directora de Innovación Social de la Fundación Todo Mejora; Marcela Ravest, Encargada de Convivencia Escolar del primer ciclo, Colegio San Ignacio Alonso Ovalle; y Carlos Bustos, Académico de la Facultad de Educación, Universidad Católica Silva Henríquez.
Educación: «La inclusión es un principio básico de justicia»
Para abrir el conversatorio, la directora de Educación diferencial dio unas palabras destacando que «la inclusión es un principio básico de justicia disruptiva. Un compromiso fundamental con el bienestar y desarrollo de cada niño, niña y adolescente».
Una vez abierto el panel de discusión, la directora de innovación de Fundación Todo mejora, Francisca Baeza, destacó que «hay un mayor conocimiento de la temática LGBT en la población más joven. Pero no necesariamente mayor inclusión y aceptación. Es necesario generar instancias de conversación profunda en las aulas».
Por su parte, Marcela Ravest otorgó una perspectiva más interiorizada sobre lo que ocurre en la escuela. «Una mirada inclusiva debe valorar el progreso individual, siempre y cuando podamos entregar las herramientas para que todos y todas aprendan», afirmó la encargada de convivencia escolar del Colegio San Ignacio Alonso Ovalle.
Finalmente, el académico Carlos Bustos mencionó que «hay tanta externalidad en nuestro pensamiento, en la sociedad chilena y mundial, que por eso nos hemos convertido en individuos independientes».