Con el objetivo de abordar los principales aprendizajes, tensiones y desafíos de la formación práctica de futuros profesores del país frente al contexto actual, desde la mirada de los coordinadores de práctica, se desarrolló el pasado 20 de agosto el Seminario “Repensando la Formación Práctica de los futuro/as docentes en contexto Covid19”.
La actividad fue organizada por Universidad Alberto Hurtado en conjunto con la Universidad Academia de Humanismo Cristiano, Pontifica Universidad Católica de Valparaíso, Universidad de Santiago de Chile, Universidad del Desarrollo, Universidad Diego Portales, Universidad Central, Universidad de Chile, Universidad Católica de la Santísima Concepción, Pontificia Universidad Católica y Universidad de O’Higgins, quienes se unieron y crearon una red de actores educativos que desarrollan su quehacer en torno al componente de la formación inicial docente (FID). Un equipo integrado por coordinadores, académicos e investigación con el fin de trabajar de manera participativa y colaborativa en una sistematización del aprendizaje y la creación de un modelo FID.
El seminario fue inaugurado por la académica María Ester López, coordinadora Transversal de Experiencias Laborales de UAH, quien señaló que la introducción de prácticas tempranas en la formación docente, se ha visto tensionada por el cierre de las escuelas, universidades y otros espacios educativos formales frente al Covid19, por lo que se han tenido que implementar diversas estrategias. “Las actividades prácticas son un componente clave en la formación de profesores, pues facilitan la adquisición de habilidades para el ejercicio y desarrollo profesional docente como los elementos necesarios para la vinculación entre teoría y práctica”, señaló.
Durante el evento también expusieron coordinadoras de la Universidad de O’Higgins, Universidad del Desarrollo, Universidad de Chile, Universidad Católica de Valparaíso y Universidad Academia de Humanismo Cristiano.
Vania Ramírez, coordinadora general de prácticas pedagógicas de la Universidad de O’Higgins comentó el trabajo que han debido realizar todas las universidades: “Es un desafío cómo diseñamos esta práctica en esta modalidad y contexto, donde el año pasado con el movimiento social quedaron competencias pendientes y tenemos que hacer que el equipo de práctica considera lo anterior y el contexto actual. Pero es también una oportunidad para reestructurar los procesos reflexivos que parecían perdidos”.
Kiomi Matsumoto, directora de formación de práctica de la Universidad del Desarrollo, menciona que una de las principales tensiones tiene relación con la necesidad de que los estudiantes se vinculen al contexto real y a la complejidad que implica. “Si bien las simulaciones los prepara para enfrentar la complejidad, no hay una forma de representar esa dificultad real, sino se acercan a ese contexto y no interactúan directamente con niños, jóvenes y establecen relaciones de aprendizaje con sus profesores colaboradores de los colegios.”
El trabajo conjunto entre diversas instituciones de educación superior es lo que más valoran las académicas para continuar con esta reflexión sobre formación docente. Para Pilar Guzmán, Coordinadora de la línea práctica de Pedagogía en Educación Básica de la Universidad Academia de Humanismo Cristiano, el contexto de los últimos meses en el país llevó a la búsqueda de nuevos caminos y horizontes. “Logramos encontrarnos de forma interuniversitaria, de escucharnos y compartir. Venimos de una cultura donde el competir y guardar lo que uno está haciendo está muy legitimado y hoy día nos abrimos a nuevas formas de pensar la formación y de pensar las relaciones, pensarnos como formadores y no como islas de cada casa de estudio”, agregó.
Accede al seminario completo aquí